Los badenes y topes de aparcamiento aumentan la seguridad en las instalaciones de la empresa y evitan los daños por colisión en los aparcamientos.
Donde hay mucho tráfico, el control del mismo tiene sentido para evitar accidentes. En las instalaciones de la empresa, esto es especialmente cierto en las zonas de carga o en los tramos más largos entre las naves y los edificios. Los badenes son muy adecuados para hacer cumplir los límites de velocidad, porque sólo se pueden cruzar a baja velocidad, normalmente hasta 10 km/h. Para aumentar la eficacia, los badenes pueden estar "conectados en serie". Los badenes son de plástico y están diseñados de forma que las fuerzas se distribuyan por toda la superficie al pasar por encima. Coches, camiones o incluso carretillas elevadoras pueden pasar por encima de estas bandas de resalto. Gracias a un sistema modular encajable, pueden adaptarse con flexibilidad y ampliar su longitud. Esto también facilita el montaje. Debido a su coloración (amarillo-negro), los badenes son directamente reconocibles como barreras de tráfico. La superficie es resistente a las pisadas y al deslizamiento. Los modulos finales son redondeados, lo que protege a los peatones y a los ciclistas.
En la mayoría de los casos, las instalaciones de la empresa constan de vías de circulación públicas y no públicas. En el tráfico público, la instalación de badenes está sujeta a aprobación. Por lo tanto, antes de instalar las bandas de resalto, debes comprobar con las autoridades competentes si estás autorizado a instalarlas y en qué medida. En cualquier caso, deben estar señalizados y los empleados deben conocer las medidas de control del tráfico. Así se evitan las reclamaciones por daños. Hablando de daños: debido a su construcción, nuestros reductores de velocidad son muy duraderos y rentables. Para su utilización a largo plazo, se recomienda una instalación permanente con anclajes al suelo.
Las zonas de aparcamiento suelen ser fácilmente reconocibles por sus límites visuales, pero siempre albergan el potencial de causar daños a los vehículos, los edificios o las zonas verdes. El motivo suele ser un uso negligente o un descuido. Los topes de parking son ideales para delimitar zonas de estacionamiento o proporcionar un apoyo adicional a los límites existentes. El principio es bastante sencillo: al acercarse lentamente, los dispositivos detienen el vehículo. Al pasar por encima, proporcionan una clara información al conductor debido a su altura. Es una forma sencilla y eficaz de proteger vehículos, edificios o zonas de la propiedad. Los topes de estacionamiento se montan directamente en el suelo con tornillos y tacos especiales.
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