El almacenamiento de productos peligrosos en contenedores modulares, transitables o no, con o sin resistencia al fuego, exige el cumplimiento del Reglamento APQ (RD 656/2017).
Los contenedores modulares de DENIOS están diseñados para cumplir con todos los requisitos de la ITC MIE APQ-10 del RD 656/2017 y, por ende, con normativas más exigentes, como el Reglamento Europeo de Productos de Construcción (RPC) y la UNE EN 1090, y los estándares de Resistencia al fuego (REI), lo que garantiza su certificación con el Marcado CE.
Además, DENIOS es el primer y único fabricante de contenedores modulares para productos peligrosos que ha obtenido la Evaluación Técnica Europea (ETE) para este tipo de contenedores.
La legalización de los contenedores modulares para productos químicos está regulada por el Reglamento de Almacenamiento de Productos Químicos (APQ), establecido en el RD 656/2017, y es aplicable en casos de nueva construcción, ampliación o modificación de instalaciones existentes. Estos contenedores, considerados equipos prefabricados, están diseñados específicamente para garantizar el almacenamiento seguro de productos químicos e inflamables, por lo que deben cumplir con una serie de normas y características específicas.
La legalización de los contenedores modulares para productos químicos requiere la elaboración de la documentación técnica necesaria que garantice el cumplimiento de la normativa vigente. Este proceso incluye la validación por parte de profesionales cualificados y organismos de control autorizados, quienes certifican la conformidad del contenedor con los requisitos establecidos en el Reglamento APQ y aseguran la contratación de un seguro de responsabilidad civil.
La documentación debe justificar aspectos clave como:
La compatibilidad de los productos almacenados.
El tipo de recipientes utilizados.
La clasificación ATEX.
Los sistemas de contención de fugas.
La ventilación.
La protección contra incendios, entre otros.
Los contenedores modulares de DENIOS ofrecen una ventaja significativa en este proceso, yaque cumplen con todos los requisitos legales y técnicos necesarios, lo que facilita enormemente su legalización. Además, cuentan con toda la documentación requerida, asegurando un cumplimiento pleno de las normativas aplicables. Con DENIOS, no solo aseguras la legalidad, sino también una solución eficiente, segura y confiable para el almacenamiento de productos químicos peligrosos.
Al ser módulos técnicos prefabricados, los contenedores modulares deben certificar el cumplimiento de los siguientes requisitos para su uso legal en el almacenamiento de productos peligrosos conforme al reglamento APQ:
Productos de la Construcción: Cumplimiento con el Reglamento (UE) nº 305/2011 de los Productos de la Construcción (RPC).
Resistencia al fuego: Certificación del comportamiento del conjunto modular frente al fuego, tanto interno como externo, con una clasificación mínima de REI 120.
El cumplimiento del Reglamento (UE) 305/2011 de Productos de la Construcción (RPC) y otras directivas relevantes le ha permitido a DENIOS obtener el Marcado CE para sus contenedores modulares, lo que certifica su conformidad con los requisitos de seguridad, calidad y fiabilidad exigidos por la legislación europea. Este cumplimiento no solo abarca el RPC, sino también normativas clave como ATEX, Baja Tensión y CEM, que aseguran que los productos cumplen con las especificaciones necesarias para su comercialización y uso legal en la Unión Europea.
La norma europea EN 1090-2 es una de las normativas más exigentes para cumplir con el RPC, ya que regula los criterios de fabricación de estructuras de acero y aluminio, tanto en el diseño como en la producción. Los requisitos incluyen, entre otros, la presencia de un coordinador de soldaduras exclusivo para la tarea, cálculos estáticos conforme al Eurocódigo 3 (EN1993), y análisis de carga en la estructura para resistir condiciones extremas como viento, nieve y sismos. Estos criterios garantizan que los contenedores ofrezcan resistencia óptima y una vida útil prolongada.
Además, la producción debe ser evaluada en planta bajo el sistema EVCP+2 (Sistema de Evaluación y Verificación de la Constancia de las Prestaciones 2+), realizado por un organismo notificado, lo que asegura la calidad y la seguridad en todo el proceso de fabricación.
El cumplimiento de la UNE EN 1090-2 no solo asegura la resistencia de los contenedores ante situaciones adversas, sino que también es fundamental para que los seguros respondan en caso de accidentes. Se puede comprobar si una empresa está correctamente certificada según la EN 1090 en https://en1090.net
La Declaración de Prestaciones (DoP) es un documento esencial que certifica la conformidad de los contenedores con el Reglamento de Productos de la Construcción (RPC) y la norma EN 1090, ofreciendo información detallada sobre las prestaciones obtenidas mediante los métodos de evaluación definidos por las normas armonizadas.
El contenido de la DoP está regulado por el RPC e incluye información clave como:
El sistema de evaluación utilizado.
El organismo notificado y su número de certificado.
La clase de ejecución.
Las características técnicas evaluadas.
Ya sea en proyectos de obra civil, soluciones con componentes prefabricados ensamblados in situ o en el uso de contenedores modulares, es imprescindible exigir las DoP correspondientes para garantizar el cumplimiento normativo.
Una vez que todos los requisitos se han cumplido, se emite el Certificado de Conformidad, lo que permite obtener el Marcado CE. Este certificado valida que el contenedor cumple con todas las normativas aplicables, permitiendo su comercialización y uso legal dentro de la Unión Europea.
Solo los proveedores con la certificación EN 1090 están autorizados para diseñar, fabricar y verificar contenedores metálicos destinados al almacenamiento de productos químicos, garantizando además la posibilidad de incluir el Marcado CE en sus productos.
Además de cumplir con los requisitos del Reglamento de Productos de la Construcción (RPC), los contenedores modulares destinados al almacenamiento de productos inflamables con resistencia al fuego deben ajustarse a lo establecido en el Reglamento de Seguridad Contra Incendios en Establecimientos Industriales (RSCIEI). Esto implica que la resistencia al fuego debe ser evaluada y certificada para el contenedor como una unidad integral, abarcando el conjunto completo de estructura, techo, paredes y puertas, y no sólo limitarse a certificar sus componentes por separado.
La resistencia debe certificarse frente al fuego exterior e interior al contenedor, en ambas dirección, ya que se pretenda:
Las normas EN 13501-1 y EN 13501-2 definen la clasificación del comportamiento al fuego de los productos de construcción y la duración de su resistencia al fuego. Las exigencias fundamentales son la capacidad de carga de la estructura y la propagación del fuego. Estas se consideran cumplidas si se demuestra la resistencia al fuego de los componentes estructurales y/o de gran tamaño durante un periodo determinado, lo cual se valida mediante pruebas de fuego.
Tras superar la prueba de resistencia al fuego, el sistema global recibe la clasificación REI. Por ejemplo, REI 120:
R = Resistencia
Capacidad de resistir la exposición al fuego en condiciones mecánicas especificadas sin perder estabilidad.
E = Estanqueidad
Capacidad de un componente con función de partición para resistir la penetración del fuego desde el lado no expuesto al fuego.
I = Aislamiento
Capacidad de evitar la transferencia de calor durante la exposición unidireccional al fuego, de modo que ninguna superficie ni material se encienda en el lado no expuesto al fuego (ΔT < 180 K).
120 = Duración en minutos
Es el tiempo durante el cual se cumplen todos los criterios (R, E e I).
Los contenedores modulares con resistencia al fuego suelen emplear las clasificaciones REI 30, 60, 90 y REI 120. De igual manera, las puertas cortafuegos, por ejemplo, se clasifican desde EI 30 hasta EI 120.
Independientemente del sistema de clasificación uniforme utilizado a nivel europeo, las normativas y legislaciones nacionales a veces imponen duraciones de clasificación diferentes. Por ejemplo, en Alemania, Austria y Suiza, una clasificación F 90 / REI 90 se considera el estándar, mientras que en otros países europeos, como Francia, España, Italia y Polonia, se exige la clasificación REI 120.
La certificación REI 120 de DENIOS no se limita a componentes individuales, sino que evalúa la resistencia del conjunto completo, incluyendo paredes, techo y otros elementos estructurales. Estos son sometidos a pruebas de fuego reales realizadas por laboratorios acreditados, lo que asegura una protección integral y el cumplimiento de los estándares requeridos por las aseguradoras.
Se debe certificar la resistencia al fuego del conjunto con fuego desde dentro y desde fuera mediante:
Informe de Clasificación de los Componentes según UN EN-13501 basados en la aplicación de sus respectivas normas armonizadas.
Evaluación del comportamiento REI del conjunto modular frente a fuego desde el interior y desde el exterior.
Declaración del fabricante con referencia a la evaluación e informes indicados en los puntos anteriores.
Esta documentación asegura que los contenedores modulares cumplen con los estándares de seguridad más exigentes, brindando protección efectiva en caso de incendio.
Cada componente del contenedor (válvulas, puertas, paneles, sistemas antiincendios, etc.) debe contar con informes individuales emitidos por los fabricantes. Estos informes certifican que cada parte cumple con los estándares de resistencia al fuego especificados en el RSCIEI.
Los componentes deben ser ensayados y clasificados según su respectiva norma armonizada, por ejemplo la EN 16034 para puertas cortafuegos.
Un componente ensayado individualmente no garantiza la misma resistencia cuando se instala en el contenedor modular.
El contenedor completo debe someterse a una evaluación que certifique su comportamiento frente al fuego desde el interior y el exterior. Esta evaluación debe realizarla un laboratorio acreditado o un organismo autorizado, que emita un informe de ensayo final certificando el cumplimiento de la resistencia al fuego REI 120.
Los ensayos se llevan a cabo en hornos especializados para comprobar la eficacia del contenedor en condiciones extremas.
Es crucial incluir la certificación de ensamblajes críticos, como la instalación de puertas cortafuegos en los paneles.
El fabricante o vendedor debe proporcionar el informe de evaluación completo, no únicamente los resultados de los ensayos individuales.
El fabricante debe emitir una declaración que respalde la documentación previa, confirmando que el contenedor cumple con todos los requisitos del RSCIEI y con la resistencia al fuego exigida.
Esta declaración debe incluir las dimensiones máximas del contenedor para las cuales es válida la evaluación REI. También debe especificar las marcas y modelos de los componentes evaluados (por ejemplo, puertas cortafuegos).
Los contenedores modulares DENIOS están certificados por Efectis France, líder en pruebas de resistencia al fuego con más de 40 años de experiencia. La clasificación REI 120, emitida por este laboratorio, es válida tanto en países con regulaciones estrictas (Francia, España, Italia, Polonia) como en aquellos con requisitos menos exigentes (Alemania, Austria).
En España, las certificaciones incluyen:
DIBt (Alemania): Certificación de validación general de construcción con protección ignífuga de 90 minutos, asegurando que los sistemas cumplen con los requisitos legales de almacenamiento de productos peligrosos y facilitan una instalación rápida.
Efectis France (Francia, Italia, España, Polonia): Clasificación REI 120, que garantiza una resistencia estructural, aislamiento térmico y estanqueidad durante 120 minutos, conforme a la norma EN 13501-2.
IBS Linz (Austria): Clasificación REI 90, que demuestra la resistencia estructural, estanqueidad e aislamiento térmico de los sistemas durante 90 minutos, adecuada para países con normativas de protección contra incendios de 90 minutos o menos.
Apesar de la existencia de estándares para componentes como estructuras metálicas y puertas cortafuegos, no existía una normativa específica para los contenedores modulares resistentes al fuego. Esto generaba una laguna en las normativas, ya que no había un estándar claro para este tipo de soluciones. Para corregir esta carencia, se desarrolló un Documento de Evaluación Europea (DEE) dedicado exclusivamente a los contenedores modulares resistentes al fuego, estableciendo un marco normativo uniforme a nivel europeo que regula su diseño y fabricación.
DENIOS es el primer fabricante en obtener la Evaluación Técnica Europea (ETE) para sus contenedores resistentes al fuego, logrando certificar estos productos con el Marcado CE y superando las certificaciones previas basadas únicamente en normativas de estructuras metálicas.
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